Azucena López Legorreta detecta a dos menores de edad en situación de mendicidad y explotación

  • En Colima nuestra niñez tiene quien los defienda: López Legorreta
  • Su situación se dará seguimiento a través de la PROCUNNACOL
  • Se les aseguró su derecho a la alimentación

 

Al dirigirse camino a las comunidades del Amarradero y Tepames para atender las necesidades de las familias, Azucena López Legorreta, Presidenta del Desarrollo Integral de la Familia en el Municipio de Colima, detectó en una tienda de conveniencia de reconocida cadena nacional, a una niña de aproximados 14 años y un niño de 11, solos, sin sus tutores, pidiendo limosna a las personas para comer.

“Eran unos hermanos, me pidieron dinero para comer y comencé a preguntarles por sus papás, pude detectar la situación en la que se encontraban y de inmediato tomé cartas en el asunto solicitando el apoyo de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Municipio de Colima (PROCUNNACOL), las coordinaciones de Atención a Población Vulnerable y de los Programas Alimentarios del DIF Municipal Colima”.

Azucena López narró su encuentro con la niña, el niño y sus progenitores: “los niños se asustaron y comenzaron a correr, tuvimos que seguirlos y las personas a nuestro paso, nos informaban que siempre estaban pidiendo dinero y que al parecer, eran explotados, situaciones que a través de la PROCUNNACOL, se iniciaron las investigaciones respectivas que nos permita contribuir a mejor sus condiciones de vida”.

Azucena López agregó que tras ubicar su domicilio, habló con el papá, detectando una situación de vulnerabilidad extrema al considerar diversos problemáticas sociales y económicas por resolver.

“Hablé con ellos, detectamos como institución su situación, sobre todo, les manifestamos nuestro interés de que la niña y el niño, no fueran expuestos de esa manera ya que pueden ser presa fácil de riesgos al exponerse en la calle pidiendo limosna”.

De esta manera, agregó, “nos pusimos en acción las coordinaciones del DIF Municipal Colima para, primeramente, asegurar su derecho a la alimentación a través de los programas alimentarios, además de generar el espíritu aliado para poderles brindar un colchón, base y cubre cama, así como apoyo con ropa y, sobre todo, darle el seguimiento de investigación por parte de la PROCUNNACOL y asegurar la protección, salvaguarda y resarcimiento de sus derechos”.